Comunicado Abril 2018

Con respecto a la última noticia referida a la ya no vuelta atrás de la importación de carne de cerdos de EE.UU., consideramos que es otra medida más que afecta directamente a los productores de cerdos de todo el país.

Sumado entre otras cosas a que los costos de producción en el último año nos aumentaron más de un 40% y el precio de nuestro producto (cerdo en pie) aumentó menos de un 15%, nuestra mayor preocupación es la eminente concentración de la actividad en pocas manos, ya que a este ritmo en menos de dos años desaparecerá la gran mayoría de los productores de cerdos, porque las medidas que se toman perjudican al sector en su conjunto, pero son los más vulnerables los que van quedando fuera del sistema por no tener las herramientas adecuadas para poder lograr la escala necesaria.

Para poder competir con sistemas productivos de otros países exigimos las mismas herramientas de competitividad, créditos acordes, programas de incentivos a la producción y valor agregado en origen, menor presión impositiva y menor burocracia para producir y/o conformar por ejemplo una cooperativa, etc. El costo argentino es una barrera que imposibilita competir en igualdad de condiciones, por otro lado, tampoco es la misma competencia, ya que nosotros ofrecemos la media res del cerdo en su conjunto al mercado, no cortes específicos como es el caso cuando se importa; el país de donde se trae, no tiene el consumo que tiene el nuestro de un corte determinado. Un ejemplo es la bondiola, para poder sacarlo nos mandan a precios muy bajos que sólo es beneficio para algunos importadores porque no baja el precio al consumidor, pero sí perjudica al sector.

También es importante ser claros con los consumidores, ya que los cortes importados que se venden no están en las condiciones que se importan, los mismos son descongelados y ofrecidos al público como frescos. Además, los organismos de control deberían requerir la fecha de elaboración (no de envasado), cuya antigüedad mínima es mayor a dos meses al momento de venta, dependiendo del país, ya que llega hasta incluso los seis meses de antigüedad por el tiempo en que tarda hasta llegar a la mesa del consumidor.

Es importante informar que la carne que ingresa de otros países a nuestro mercado, viene con ractopamina, este medicamento es un beta-antagonista que aumenta la síntesis de proteína, y no está permitida su utilización en Argentina, pero la consumimos igual. La misma, podría permanecer hasta un 20 % en carne. Este producto está prohibido en 160 países del mundo (incluidos la Unión Europea, Rusia y China) debido a los efectos que tiene sobre la salud humana.

También es importante saber que hay un riesgo sanitario para nuestros cerdos al traer carne de países que son endémicos de una enfermedad (denominada PRRS) que afecta a los cerdos, no a los humanos. Hay probabilidades de que pueda ingresar al país por la carne y lamentablemente en la producción hay un antes y un después de tener esta enfermedad (enfermedad súper devastadora, afecta más del 50% de la producción cuando ingresa a un país).

Por todas estas cuestiones (no decimos cerrar las importaciones) pero sí es lógico pedir que el producto importado con respecto al nacional deba estar bien diferenciado y sumamente controlado; la mejor manera es que se venda como viene, pero para esto debe haber trazabilidad adecuada y cupos de importación, sabiendo la real demanda de cada corte. Y por supuesto que no ingrese carne al país con ractopamina ni con PRRS.

El sector a nivel nacional ha demostrado mucha madurez tratando de buscar el diálogo en todo momento, fuimos escuchados, pero sin respuestas, incluso las medidas que hasta aquí se tomaron en su mayoría fueron perjudiciales para la actividad.

Estamos convencidos que es necesario delinear, con el concurso de toda la cadena porcina, un Plan Porcino Nacional inclusivo y estratégico a largo plazo; transversal a la política de turno, considerando que las necesidades del productor porcino datan de mucho tiempo y se hace necesario una política que se sustente en el tiempo, que lamentablemente cuando llegue, si es que llega, va a ser demasiado tarde.

Marcos G. Diankoff Buttner
Presidente APPORSAFE
0342-155304128

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